MI EXPERIENCIA EN EL RUNNING

Debido a que el running es una actividad que está muy en boga, es muy común encontrar muchos artículos que tratan al respecto y que abordan temas que van desde los beneficios de practicar este deporte, así como consejos sobre la mejor manera de iniciar a practicarlo, además de ejercicios para superar lesiones, o sobre alimentos que mejoran el rendimiento, entre muchos otros.

Del otro lado de la moneda, están los cientos de personas que cuentan sus historias de éxito con el running, ya que éste es un deporte capaz de cambiar vidas y dichas historias lo demuestran.

Los beneficios que los corredores citan van desde la pérdida de peso, mejoría en la salud, control de enfermedades crónicas, hasta cambios positivos en estados de ánimo, superación de depresiones, disminución de estados de estrés, etc.

Así que, para inaugurar este blog, deseo contarles un poco sobre mi experiencia personal al practicar el running:

Todo empezó ya casi un año, fue entrado el mes de abril del 2013, no recuerdo la fecha exacta. Yo llevaba algunos meses de haber entrado en el gimnasio y mi propósito era la pérdida de peso. Así que, mi instructor me recomendó complementar mi rutina con salir a correr, argumentando que por ser una actividad de cardiovascular podía ayudarme mucho más con mi objetivo. Además, me recomendó inscribirme en una carrera, ya que de esta forma iba a tener el compromiso y la motivación de salir a entrar durante la semana.

Recuerdo que para ese entonces, yo ya había pensado en que algún día de mi vida me gustaría hacer una carrera, por lo tanto la idea me gustó. Precisamente, para finales de mayo de ese mismo año estaba programada una carrera preparada por un grupo de baile de la universidad a la que asistía, así que me inscribí.

Las distancias para esa carrera fueron de 4 y 8km, por supuesto me inscribí en la más pequeña porque fue la recomendación de mi instructor y segundo porque no quería llegar a la meta montada en la ambulancia.

Así que, el primer domingo luego de inscribirme salí a entrenar, fue la primera vez que salí a correr completamente sola y con una meta fijada. Por lo que, la pérdida de peso había quedado relegada a un segundo plano y ahora lo que más me importaba era no llegar de última ese día.

Ese domingo corrí poco menos de 3km, duré más de 40 minutos y llegué descompuesta a mi casa, es más apenas llegué a mi casa. Sin embargo, si me hubiera dejado llevar por ese día, por esa carrera, nunca más hubiera vuelto a correr, porque fue simplemente horrible, terrible!! Todo lo contrario, esa experiencia me llevó a pensar en cómo podía hacerlo mejor. Esa experiencia me reto a hacerlo mejor, a salir a correr más y a tratar de correr esos 4km de la mejor manera posible. Tenía un mes antes de la carrera para lograrlo y debía aprovecharlo al máximo.

Cuando se acercó la fecha de la carrera y llegó el momento de recoger el paquete, mi emoción creció al máximo. Tenía en mis manos mi primera camiseta, mi primera medalla, mi primer número. Tanto fue así la emoción, que el día antes de la carrera tenía mi ropa lista, era demasiada emoción y contaba las horas para que llegará las 8:00 am y poder salir de la línea de meta.

El día llegó y hubo 3 cosas que marcaron para siempre mi vida y que me conquistaron a seguir corriendo hasta el día de hoy. Esas 3 cosas fueron:

1.        La ansiedad que se siente cuando estas detrás de la línea de meta esperando que la organización de el banderazo de salida.
2.      Las pisadas de todos los corredores sobre el asfalto es liberador y se siente como una familia que comparte una misma pasión.
3.        La satisfacción tan enorme que se siente al entrar en la meta y sentir que se cumplió la tarea pero que por otro lado se quiere más metas cumplidas.

Así que, corrí esos 4km de una manera que ni yo me imaginé, duré 25 minutos y me enamoré del running hasta la actualidad.

Luego quise más y corrí 6km, luego quise más y corrí 8km, luego quise más y corrí 10km. En total he hecho 6 carreras, no todas las que me gustaría hacer, más por falta de recursos que por falta de ganas o interés.

Ahora estoy inscrita para correr la Sol y Arena el 26 de abril, esta es una carrera que siempre me ha llamado la atención y que representa un nuevo reto para mí. Así que, desde hace poco más de un mes empecé a entrenar porque la exigencia es más alta a la de las carreras que he hecho hasta el momento, y yo quiero hacerla de una manera excelente.

Por otro lado, una meta que tengo para este año es correr mi primera media maratón, esos 21km que estoy segura me embarcaran aún más en esta aventura llamada running.

En fin, esto se ha convertido en parte integral de mi vida y no lo pienso dejar, el running me ha llevado a alcanzar límites a los cuales nunca pensé llegar.

Sobre los beneficios que el running me ha proporcionado están:

• Una notable pérdida de peso y disminución del porcentaje de grasa corporal. Yo llegue a pesar 65kg (mido 1,57cm., soy una mujer pequeña) por lo que estaba bastante gordita. En la actualidad, peso 53kg, ya he logrado bajar 12kg. Evidentemente, esto lo he logrado aunado a una alimentación saludable rica en verduras, frutas y hortalizas (poca, muy poca, comida chatarra, dulces, helados, etc.), mucha agua y complementado con el trabajo en el gimnasio, constancia, dedicación y compromiso.

• Además, antes de tomar la decisión de dejar el sedentarismo a un lado, me había realizado los exámenes médicos de rutina y  estos dieron como resultado que a mis 21 años (en ese entonces) tenía el colesterol malo alto, entonces fue cuando pensé que si esto estaba sucediendo a mis 21 años como iba a ser cuando tuviera 30 años. Por lo que, este acontecimiento me motivo a iniciar una vida activa y lo más saludable posible. Luego de realizar por algunos meses actividad física y buena alimentación, volví a realizarme los exámenes y esta vez todo había vuelto a la normalidad.
• También, otro beneficio ha sido la eliminación de crisis de asma durante el periodo en el que inicié a correr hasta la actualidad. Yo he sido asmática desde que tenía 1 año de edad y desde entonces he tenido crisis asmáticas mínimo una vez al año sin falta, desde que inicié a correr no he vuelto a tener ninguna pues siento que tengo, ahora, un sistema respiratorio activo, y no perezoso como antes.
• Por último, mi condición física ha mejorado notablemente desde aquel día que corrí menos de 3km y casi muero, al día de hoy que he llegado a correr 13km en perfectas condiciones. Es delicioso correr sin tantas molestias como al principio, pero eso solo lo da la constancia en un deporte tan apasionante y retador como este.

En fin, yo era una persona que no corría ni las cortinas de mi casa, en el colegio detestaba correr “la milla”, inventaba miles de excusas para no hacerlo. Por lo que, llegar a correr era algo que jamás me imaginé llegar a hacer, pero sin embargo aquí estoy y me encanta. El running me proporciona felicidad, satisfacción, me libera del estrés,  me motiva y me hace desear llevar un estilo de vida saludable.

Si usted desea iniciarse en este deporte, anímese. Si yo pude estoy segura que cualquiera podrá, solo basta tener disposición y ganas de hacerlo. Este es una actividad gratuita, al alcance de todas.

Póngase las tenis y salga a correr, su salud se lo agradecerá!!!